Cómo prepararte para una inspección sanitaria en tu restaurante
Uno de los momentos más temidos en nuestro sector es la inspección sanitaria, por las consecuencias que pudiera tener y también porque de alguna manera es como poner la lupa en las telarañas del negocio. Es de esos aspectos menos agradables de nuestra profesión, pero completamente necesarios para garantizar la seguridad alimentaria.
Comencemos por la definición de una inspección sanitaria:
Es un procedimiento ordenado por los ministerios de salud de los países, donde se realiza una evaluación en detalle de varios aspectos del restaurante, para garantizar que estén cumpliendo con la normativa sanitaria.
Lo cierto es que el inspector o inspectora puede llegar por sorpresa al establecimiento y encontrar fallos que podrían ser muy perjudiciales para el restaurante, en forma de multa o incluso de cierre, y por supuesto para los clientes, en forma de daños a su salud.
Para evitar estas consecuencias, hemos preparado la siguiente lista con los puntos más importantes a la hora de estar en regla y conseguir un acta de inspección sanitaria positiva. Toma nota:
Conocer la normativa vigente en cada país que se encuentre el restaurante. Estúdiate al detalle el que corresponde a tu localidad.
Realizar la formación del personal en los diferentes planes sanitarios. Algunos suelen ser el plan de alérgenos, de desinfección, de temperaturas, de control de plagas, de control de agua, de ventilación, etc. También llamados sistemas de autocontrol, pues es lo primero que suelen mirar los inspectores.
Tener los documentos de haberos formado en estos planes siempre vigentes, ubicados en el mismo sitio y que el personal pueda acceder a ellos.
Formar a cada trabajador en la correcta manipulación alimentos y cumplir siempre con los pasos para que no os tome por sorpresa en el momento de la inspección sanitaria.
Cuidar siempre que no haya alimentos caducados en los almacenes, refrigeradores, etc, y que estén correctamente etiquetados y ordenados según sus fechas de caducidad y de preparación.
ropa adecuados para realizar las labores de forma higiénica para el establecimiento y también de forma segura para la salud del personal.
Vestir siempre con el calzado yMantener siempre los equipos y herramientas limpias y funcionando correctamente, especialmente aquellos de los que depende la comida.
Contratar a un empresa de control de plagas autorizada, para que realice los controles de prevención necesarios de forma periódica, y como no, tener siempre a la mano los documentos que lo avalen.
gestión de los residuos y sacar la basura varias al día, para que el establecimiento esté limpio la mayor parte del tiempo.
Los inspectores se fijan en cuánta basura hay acumulada y por cuánto tiempo, así que es importante tener un protocolo deTener también un control de limpieza especial para el baño, que tiene que estar limpio siempre. Para ello es importante establecer un protocolo de limpieza por horarios y reponer el jabón, papel higiénico y papel para manos con regularidad.
Otro aspecto que requiere especial atención es la tabla de cortar, es uno de los implementos donde más se acumulam gérmenes y los inspectores lo saben. Además es susceptible a la contaminación cruzada. Establece entonces un protocolo de limpieza y reposición de esta herramienta.
Asegúrate de que estos aspectos sean limpiados a diario: los trapos de cocina, el cubo de la basura, los enchufes, el suelo, las mesas de trabajo y todos los espacios de trabajo más visibles.
Por otro lado hay que desinfectar también diariamente otros implementos como cubiertos, ollas, cazuelas, sartenes, planchas. Pueden lavarse con agua caliente y productos especiales para desinfectarlos. Los inspectores también se fijarán en que esto se cumpla.
Establecer protocolos para mantener limpias las puertas, ventanas, pomos, cerraduras, cristales, cajoneras, estanterías, etc, al menos una vez por semana. Será la garantía de que estén en buen estado al momento de la inspección.
Realizar mantenimiento regular de equipos como el aire acondicionado y los extractores de humo por ejemplo, para que funcionen correctamente siempre.
Al momento de enfrentar la inspección, escuchar atentamente lo que se pida, actuar con serenidad e ir facilitando la documentación con un genuino interés en facilitar la labor de los inspectores.
Por último, es ideal contar con la asesoría periódica de empresas especialistas en sanidad e higiene alimentaria, para estar al día con la normativa y evitar sorpresas negativas.
¿Está preparado tu equipo y tu negocio para recibir una inspección sanitaria? Esperamos que sí y que llevéis en regla esta lista. Para completar esta información también leer los siguientes artículos: