10 señales de que la gestión del restaurante va mal
- • El restaurante está vacío en horas pico
- • Los gastos son mayores que las ventas
- • El inventario es impreciso
- • Hay demasiada rotación de personal
- • El equipo trabaja con mala actitud
- • El dueño hace el trabajo de los camareros
- • Los clientes habituales dejan de venir
- • El restaurante recibe menos reservas
- • Aumentan los comentarios negativos
- • El restaurante reduce sus horarios
En gestión de restaurantes, ha sido común escuchar que un gran porcentaje de los locales de restauración no llegan a los 3 años. Con alivio vemos que esa situación está cambiando, gracias a que los restauradores cuentan cada vez con más información y herramientas, para sacar adelante un negocio tan complejo.
Abrir es difícil, lo sabemos, pero permanecer puede que lo sea aún más, especialmente si no se atienden a tiempo aspectos cruciales. Estar alerta a ciertas señales que va dando el desarrollo del negocio, puede ser la clave para prever dificultades y encontrar soluciones.
En un artículo que publicamos recientemente, hablamos sobre las señales de una gestión de restaurantes exitosa. En esta oportunidad nos ponemos un poco más cautelosos, para hablar de las 10 pistas que pueden indicarte que el negocio no va tan bien como se cree. Lee con atención y si encuentras alguna de estas señales en tu restaurante, ponte manos a la obra de inmediato:
El restaurante está vacío en horas pico
Tener las mesas vacías en algunos momentos es digamos “normal” en todo restaurante. Lo que sería una mala señal, es que el restaurante esté vacío en horas pico o en los servicios más importantes. Más aún si los restaurantes de la zona están llenos. Si es tu caso, responde a esta pregunta: ¿Qué encuentran los clientes en la competencia, que no hay en tu negocio? ¿Atención al cliente personalizada? ¿Comida más saludable? ¿Alguna tendencia que esté de moda?
Recuerda que con ElTenedor puedes implementar varias estrategias para llenar tus mesas siempre que lo necesites. Haz clic aquí para ayudarte a lograrlo.
Los gastos son mayores que las ventas
Si en un restaurante se va más dinero del que entra, es una señal muy evidente de que las finanzas no están funcionando correctamente. Así se trate de un restaurante muy popular, la contabilidad tiene que dar siempre números positivos. Para ello es fundamental tener claro cuáles son los gastos fijos y los variables, y establecer bien las prioridades. Asegúrate de que tus platos son rentables y cubren las necesidades principales. Revisa el coste de los alimentos, de los proveedores, el sueldo de tus empleados y haz los cambios que sean necesarios. Evita a toda costa los números rojos.
El inventario es impreciso
Un stock desordenado e impreciso también es una mala señal en gestión de restaurantes, pues indica que no se tiene un control de la compra y utilización de estos productos. Lo cierto es que para conocer el verdadero coste de tus platos, es imprescindible revisar regularmente el inventario y actualizar los precios. Esto también ayuda a optimizar las compras, a elegir bien los productos que realmente se venden y a sacar del menú los que se quedan en los platos. También sirve para llevar a cabo una política de reducción de residuos y ahorrar.
Hay demasiada rotación de personal
Si vas varias veces a un mismo restaurante en un período corto… ¿no te daría cierta desconfianza que los camareros fuesen distintos cada vez? Pues esta misma imagen se llevan los clientes de tu negocio, si hay demasiada rotación de personal. Bien sea porque los empleados se marchan voluntariamente, o porque el personal que contratas no acaba de dar la talla, es prioritario atender este problema cuanto antes. Un asesor en recursos humanos podría ser de gran ayuda.
El equipo trabaja con mala actitud
Un termómetro infalible de la salud de un restaurante es la actitud del equipo. Si el personal llega tarde, trabaja de mal humor, deja de ser proactivo o ya no tiene la misma pasión la mayoría del tiempo, algo está fallando. Puedes comunicarte con ellos y preguntarles lo que ocurre. ¿Sueldos bajos? ¿Malas condiciones laborales? ¿Sobrecarga de trabajo? ¿Problemas de organización? También asegúrate de contar con un buen gerente, pues es la pieza clave para coordinar bien el equipo.
El dueño hace el trabajo de los camareros
Aunque el dueño de un restaurante suele ser la persona más implicada en el negocio, encontrarlo con regularidad haciendo el trabajo de un camarero o camarera, no es una muy buena señal. Puede indicar que el negocio no da las ganancias suficientes para pagar este personal, o que no se está distribuyendo bien el dinero. Si es tu caso, revisa con honestidad todos tus gastos e intenta hacer ajustes. Es mejor invertir en un camarero, que en alguna decoración muy exclusiva, o en ingredientes muy caros para impresionar a los clientes.
Para delegar con confianza las labores a tu equipo, puedes integrar en tu negocio ElTenedor Manager, un software de gestión que permite coordinar diversas tareas para ahorrar tiempo y esfuerzo. Muy útil para que la cabeza del restaurante pueda centrarse en sus funciones. Haz clic aquí para obtenerlo de forma gratuita.
Los clientes habituales dejan de venir
¿Por qué un cliente habitual dejaría de venir al local? La razón más sensible es algún fallo en la atención al cliente, sentirse abandonado como cliente habitual, o no tratado de forma especial. También puede deberse a un aumento desproporcionado de los precios, que la calidad de la comida ha decaído o que el restaurante no está siguiendo las tendencias del momento. Los comensales habituales son nuestros mejores aliados para saber si algo va mal, así que recuerda practicar la personalización constantemente para tener una sólida fidelización de clientes.
El restaurante recibe menos reservas
Si notas que cada vez hay menos reservas de tus mesas, puede ser una señal de alarma que deberás atender de inmediato. Más aún si tu negocio depende de esta forma de atraer comensales, por encontrarse en una zona con pocos clientes de paso, por ejemplo. Para recibir reservas no basta con publicar el restaurante en los canales digitales y esperar a que lleguen los clientes. Asegúrate de tener un perfil atractivo, informar siempre de todas tus ofertas y hacer promociones que te ayuden a captar clientes siempre. Lee aquí para saber cómo multiplicar tus reservas con ElTenedor.
Aumentan los comentarios negativos
Recibir críticas online de vez en cuando, es algo natural, pues no todos los días son los mismos en restauración, pero si aumentan, hay que atenderlas. De hecho, los comentarios negativos son una gran oportunidad para saber qué no está funcionando y mejorarlo. Responder a estas críticas también es fundamental para la imagen de marca del negocio. Puedes tener una política para responder a todas las opiniones de forma asertiva, y aplicarla siempre. En el siguiente artículo te explicamos cómo: 7 trucos de marketing para responder a las opiniones.
El restaurante reduce sus horarios
Hay restaurantes que de un momento a otro cierran un servicio, abre un día menos o reducen sus horarios. Suele ser una señal de que los gastos para funcionar no están siendo cubiertos, y se toma esta medida para remontar durante un tiempo o simplemente para no cerrar. En estos casos, es muy importante comunicar a los clientes esos cambios de horarios, y por supuesto desarrollar estrategias para salir del atolladero. Si es tu caso, haz clic aquí para leer algunos ejemplos de eventos que puedes realizar para levantar esos días muertos. ¡Lo importante es remontar!
¿Es duro mantener un negocio de restauración? Por supuesto. Sin embargo, desde ElTenedor creemos que es un reto apasionante y que valen la pena todos los esfuerzos. Un camino de aprendizaje constante, con errores y fracasos, pero también con grandes alegrías y recompensas. ¿O acaso no es muy satisfactorio tener tus mesas llenas de clientes felices? ¡Seguro que sabes de qué hablamos! Entonces, si en tu restaurante hay alguna de estas 10 señales, es hora de cambiar tu situación. Haz clic aquí si necesitas ayuda para conseguirlo. En ElTenedor estaremos encantados de echarte una mano.
- El restaurante está vacío en horas pico
- Los gastos son mayores que las ventas
- El inventario es impreciso
- Hay demasiada rotación de personal
- El equipo trabaja con mala actitud
- El dueño hace el trabajo de los camareros
- Los clientes habituales dejan de venir
- El restaurante recibe menos reservas
- Aumentan los comentarios negativos
- El restaurante reduce sus horarios